La cocaína se encuentra en la lista de las sustancias ilícitas más adictivas del mundo, en la misma que se encuentran la heroína, la nicotina, la metadona, la metanfetamina y los barbitúricos. En IDDEM podemos ayudarte.
La cocaína es una droga estimulante muy adictiva. Proviene de las hojas de coca, que han sido utilizadas por los sudamericanos debido a sus efectos estimulantes desde hace miles de años. A principios del siglo XX, la cocaína purificada se usaba en una gran cantidad de tónicos y medicamentos para aliviar diversas dolencias. Será en las décadas de 1980 y 1990 cuando se extienda su uso como droga recreativa, el cual es ilegal en la actualidad.
La cocaína, junto al alcohol, es la droga más consumida de España. También se la conoce como coca, nieve, farlopa, perico y blanca, entre otros apodos, y se consume de forma esnifada o inyectada. Hay dos formas químicas de la cocaína que suelen consumirse: la sal de clorhidrato (que es soluble en agua y se esnifa o inyecta) y los cristales de cocaína o base (que se fuma).
Cuando una persona consume cocaína habitualmente, desarrolla tolerancia y dependencia física. Si se deja de consumir, aparecerán síntomas de abstinencia. Cuánto más se consuma, más riesgo de adicción aparecerá.
Principalmente, la cocaína produce sus efectos psicoactivos y adictivos al actuar sobre el sistema límbico del cerebro, un conjunto de regiones interconectadas que regulan el placer y el circuito de recompensas. Al consumir, se produce una acumulación anómala de dopamina (uno de los neurotransmisores del cerebro), lo que provoca euforia y lucidez. Cuando el efecto cesa, se corta el torrente de dopamina y aparece el deseo de volver a consumir.
Los efectos inmediatos más frecuentes son:
Si se sigue consumiendo, los deseos por volver a tomar cocaína y experimentar sus efectos irán a más. Pero cuanta más cocaína se
consume, más se adaptará el cerebro a ella. Se necesitará una dosis más fuerte para sentirse igual y se llegará a depender de la droga para todo. Esto puede provocar una adicción severa o, incluso, una sobredosis.
Las dosis más fuertes y frecuentes también pueden causar cambios a largo plazo en la química del cerebro. El cuerpo y la mente comienzan a depender de la droga. Esto provoca que resulte más difícil pensar, dormir y recordar cosas. Además, el tiempo de reacción ante los estímulos será más lento y se corre el riesgo de tener más problemas cardíacos, estomacales y pulmonares que las personas no adictas.
Somos especialistas en adicciones. Nuestro equipo, formado por psicólogos y terapeutas, estudiará tu caso de manera individualizada para que el tratamiento sea un éxito.
Compartir tu recuperación con más personas que están en el mismo camino que tú, reconforta y multiplica las probabilidades de éxito.
Un espacio privado donde sentirte escuchado. Un profesional estudiará tu caso en detalle para acompañarte en tu proceso de recuperación.
En ocasiones es necesario un ingreso para la desintoxicación.
Te asesoramos para elegir el centro que mejor se adapte a tus necesidades.
Cuando el adicto no se ha decidido a dar el primer paso, le acompañamos en el proceso de darse cuenta que su adicción es un problema y que tiene solución.
Nuestro equipo, formado por psicólogos especializados en adicciones, y terapeutas, los cuales han experimentado este método de recuperación en primera persona, te acompañarán en tu camino. Con tu motivación y nuestra experiencia conseguir una vida libre de adicciones es posible.
El abuso de la cocaína puede tener efectos a largo plazo, que pueden variar según el método de consumo y el tiempo que se haya usado la droga.
Las personas que consumen cocaína a menudo también pueden tener efectos secundarios más graves y problemas de salud, como:
Déjanos tus datos y nos pondremos en contacto contigo lo antesposible. Tendremos una cita gratuita y sin compromiso donde te informaremos de las posibilidades de tratamiento y diseñaremos un plan a medida adecuado a tus necesidades y circunstancias.
Los signos y síntomas del abuso y la adicción a la cocaína pueden variar de una persona a otra y también dependen de una serie de factores diferentes, incluida la cantidad de cocaína que consume cada individuo y la frecuencia con la que lo hace. Sin embargo, los siguientes indicadores se encuentran entre los síntomas físicos, psicológicos y conductuales más comunes que pueden sugerir que una persona ha desarrollado un problema de adicción a la cocaína.
Los signos comunes del consumo de cocaína incluyen:
Somos especialistas en adicciones. Nuestro equipo, formado por psicólogos y terapeutas, estudiará tu caso de manera individualizada para que el tratamiento sea un éxito. La primera consulta es gratuita y sin compromiso.
COPYRIGHT © 2023 IDDEM – TRATAMIENTO DE ADICCIONES EN MADRID | POLÍTICA DE PRIVACIDAD – AVISO LEGAL
